Las virgenes eternas

Hay algo un poco inexplicable que me pasa con Sofia Coppola y sus películas, me gustan con efecto retardado, mi cerebro tarda algo en asimilarlas, como si le tuviera que dejar un espacio después de verlas para que me puedan gustar, me pasó con Lost in Translation, (primera vez me pareció horrenda, segunda no tanto, tercera me gustó mucho) y me pasó con Las virgenes suicidas.
Mientras veía la película (por fin de una y no de a cachos) me parecía frágil, etérea, como si en cualquier momento pudiera suceder algo que la cagase y me dejase de gustar, siempre entre ese fino hilo entre lo sutilmente bueno y lo retorcidamente incoherente.

Pero no, no pasó, la película me gustó en su totalidad, cuando se terminaron los créditos, me tomé un café y me fumé un cigarro, ahí es cuando me gustó de verdad.

Para el que no la haya visto, le hago un resumen.
Trata de una familia estadounidense de los años setenta, los padres son terriblemente conservadores y religiosos y tienen cinco hijas a las cuales no las dejan casi tener relaciones sociales ni fiestas, etc.
Las chicas son la obsesión de unos vecinos del barrio que coleccionan todo tipo de cosas de ellas, es propio decir que estos chicos son los propios narradores de la historia.
Cuando Cecilia, la menor de 13 años se suicida todo cambia a peor, los padres se cierran aún más y las chicas viven encerradas en ellas mismas. No es por tirar spoilers y contar el final, pero con el título ya todo el mundo sabe que se van a suicidar, y lo hacen, pero está claro decir que si no se llamase asi, ni te dabas cuenta de lo que harían hasta que lo hacen.


La peli está basada en el libro de Jeffrey Eugenides del mismo título, yo no lo leí, dicen que la Coppola se cargó el guión, no lo sé, puede que sí, pero desde luego hay cosas que sobresalen como la fotografía y la música compuesta por la banda Air, que acompaña a la perfección durante todo el film con esa suave melodía envuelta en un escabroso, macabro y oscuro mundo adolescente.

Cabe destacar también la actuación de Kathleen Turner, la cual borda el papel, como casi todo lo que hace, ese de madre puritana, estricta y severa lo borda, como en Mamá asesina (Serial mom) es el que mejor le queda.
De entre todas destaco una escena que me sobrecojió. Una de las hermanas (Kristen Dunst) llega tarde a casa, como castigo a demás de no dejar salir a todas, ni si quiera al colegio, de casa durante meses, les hace quemar y tirar todos sus discos, me hacen a mi eso (sobre todo con mis discos de Tori) y me muero, con razón las pobres sesuicidaron.

Dejo el video de la banda sonora, genial tema.